Isidora is Callao Calipso Queen

Al sur del estado Bolívar, después de Guasipati te consigues a las orillas del río Yuruari un pueblito multicolor, embrujado por el oro brillante; mezcla gloriosa de franceses e ingleses con criollos que nos dejaron el #Patuá, el #Calipso y una larga historia con anécdotas de encanto.
La Madama, el Minero, Isidora, Carlos Small y el Medio Pinto representan la idiosincracia del Callaoense, pura identidad que al son del Bumbac, el cuatro y la charrasca, otorgan la cadencia única de nuestro Calipso -que mucho tiene antillano-.
Madama en la Iglesia "Nuestra Señora del Carmen" en El Callao. Feb 2015
Para allá arranqué en los carnavales 2015, era mi cuarta visita a El Callao y al llegar empecé a buscar a algunos amigos que andaban en la corredera de terminar los detalles para el festín que iniciaría pronto. En la mañanita nos fuimos al mercado a comer domplin -herencia de las islas caribeñas- relleno de lo que quieras: queso, pollo, asadura, carne, jamón, perico, etc. Siempre digo que los mercados dicen mucho de su región, puedes percibir rápidamente sus costumbres y gustos, su forma de vida. Nos encontramos con José "Chispita" Lezama, creador de la sopa que se vende en la infraestructura central del mercado de El Callao, lleva costilla, hueso 'e rabo, auyama, ocupo chino, yuca, aliño; ahí mismito le pregunté: y ¿la sal? me respondió: bueno mija, al gusto de uno. ¡Puro encanto!.

En plena entrevista del "Chispita" Lezama.

Vendedor de carne

Con la barriga llena salí corriendo a la iglesia, pues, como es de costumbre se realizaba la misa en homenaje a las Madamas -modificación criolla del francés Madame-, quienes representan lo que en sus inicios fueron las mujeres que habitaban este poblado, íconos de lucha social, de trajes vaporosos con exquisita gastronomía, de cantar pausado y acompasado bailar.
A pesar del tiempo nublado comenzó el bochinche, empezaron a salir comparsas varias. La Agricultura, una de las mas emblemáticas, arranca en la madrugada; lleva como fin el fortalecimiento de la agricultura como medio de trabajo, desplazado por la minería en su momento. Los Medio Pinto son personajes clásicos, hombres o mujeres negritos de punta a punta que bañan su cuerpo con mezcla de papelón y lo que ellos llaman "negro humo", pelan los ojos y tienen comportamiento alocado que te sacan carcajadas interminables. Llevan consigo una latica llena de ese betún y siempre te piden dinero, de allí su nombre: ".. me das medio o te pinto.."; estos desordenados salen a la media noche y parrandean hasta las 6:00 am. 
También están los mineros -que no logré ver esta vez- y diablos por montón. Son mas de 80 sociedades civiles que poseen comparsas con música incluida.

Comparsa de Las Madamas

Una de las tantas comparsas de Diablos
Luego de bailar un ratico, agarramos camino a la primera iglesia anglicana construida en Venezuela, allí nos esperaba el Padre Adams quien resultó ser un extraordinario conocedor de la historia de su pueblo. Pasamos horas escuchando sus vivencias, los cuentos de sus abuelos, de las minas, del oro que brotaba en las calles, ¡hasta del origen del Calipso! y el significado de los diablos en la comparsa. De hablar pausado y perfecto acento británico del inglés nos endulzó la tarde y se ganó el título de embajador de El Callao.

Entrevista al Padre Adams
El hermano del Padre Adams en la fachada de la iglesia anglicana en El Callao.
Me escapé a la casa "Las 3 rosas" de mi amiga Iraima quien hace vestidos de Madama y por casualidad estaba su mamá, la señora Beatriz, quien a sus 76 años sigue representando a las Madamas, también se ha dedicado a confeccionar trajes a las diversas comparsas de la familia. Su padre era trinitario y ella tiene 12 hijos. Los varones músicos y las mujeres se encargan de los vestidos -como ella-. ¡Hasta tataranietos tengo! nos decía en plena tertulia. Habían unos chamos, también de la familia a quienes pedimos nos tocaran algo (ojalá logre colgarles el video).
El Calipso ha sufrido sus variantes en el tiempo, casi todos usan cuatro eléctrico y el bumbac se hizo mas largo, el original poco se utiliza. Lo importante es que se mantenga, se cuide y quiera la tradición. Ellos se pelean para ver quien canta, mantienen el patuá, y si tocan muy rápido Beatriz los regaña diciéndoles: ¡eso no se toca así!.

Madama Beatriz Melo de López y sus nietos

Regresé a las calles con el bochinche, se bailó, se cantó, se tomó foto, se entrevistó y se filmó. Ya caída la noche, arrancamos a Upata porque en El Callao no cabía un alma, ¡casa llena! sin posadas libres.

En plena gozadera
Así de sabrosa y diversa suena mi #VenezuelaDiversa

Madamitas en plena actividad


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