La Ciénaga: agüita que cura las penas.

Así como San Juan, si Venezuela lo tiene, Venezuela te lo da.

Toda nuestra costa es azul y verde con ese calorcito del Caribe que te arropa en cualquier punto. Si la recorres solo -o acompañado- te enamora, estremece el alma y de ñapa te alegra el corazón.

Esta vez me fui a Ocumare de la Costa (Estado Aragua), desde Caracas no queda tan lejos. Una vez allá, llegué a La Boca y me monté en una lanchita que me regaló un paseo hermoso donde te deleitas con la muralla imponente que da la cara al Mar Caribe. Luego de 10 min de travesía gira hacia una ensenada grandiosa con un toque de misterio, tranquilita y escondida donde solo puedes escuchar los pajaritos en su algarabía. No hay oleaje y amanece tempranito. Estaba igualita a la primera vez que la conocí. Arena blanca, manglares por doquier y agüita que cura las penas.

La Ciénaga - Aragua - Venezuela
Después de sumergirte en tal cadencia no querrás salir nunca. 

En los días de semana debes organizar las comidas, pues no existen tarantines ni vendedores, ¡y menos mal! porque es una playa corta, coqueta y de paz. Los fines de semana hay un par de restaurantes y toldos. También alquilan casitas con fachadas antillanas, una mas encantadora que la otra. Todo es limpio, colorido y solitario porque el único acceso es marítimo. 

La Ciénaga- Aragua- Venezuela

Luego de echarme por horas -hasta dormir- me monté en la lanchita otra vez y me fui a pasear. Tienen un túnel natural de manglares que te crea una especie de ilusión, cuesta dilucidar dónde termina la raíz, pues la sensación de luz atrapada no te permite delimitar la laguna. Los motores de la embarcación apagados, la ausencia de corriente y el silencio, convierten el momento en magia, solo debes escuchar y mirar. Cuando detallas los troncos determinas una versión tropical del difunto puente de las Artes en París, pero sin candados, los locales le llaman túnel del amor y sostienen que las parejas que allí tallen sus nombres no se separan nunquísima y se aman toda la vida. Imaginé mi propia historia pero luego noté que era la cámara quien me tomaba de la mano y se me pasó -risas-.

Túnel del Amor - La Ciénaga - Aragua- Venezuela
Después me fui a una laguna de barro negro muy divertida donde te embadurnas como un niño, mas adelante jugué con estrellas de mar y por último te recomiendo pidas ir a La Piscina, queda en frente de la playa principal y es el punto mas aquamarino de la ensenada, si se te cae el anillo no te preocupes, es tan transparente que lo consigues de inmediato. De ese punto les debo la foto porque solo me dediqué a ser un coro-coro feliz con el snorkel.

Casita encantadora - La Ciénaga- Aragua- Venezuela

Muchas compañías de viaje ofrecen el full day desde Caracas, la desventaja es que van muchas personas para el pequeño espacio, ponen música a un volumen que entorpece la armonía del lugar. Si decides ir -sea como sea- llévate la basura de vuelta, recuerda dejar el lugar tan bonito como te gustaría disfrutarlo cuando regreses, sin olvidar que es habitad de pajaritos, peces y tortugas que no necesitan tus desechos.

¡Chao!

Comentarios

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  2. Quiero visitar ese túnel del amor. ...! Excelente descripción del lugar saludos desde el Oriente venezolano. Abrazos

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  3. Què bella Cyn, quiero ir. Me encantó el relato y las fotos. Un abrazo.

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  4. Què bella Cyn, quiero ir. Me encantó el relato y las fotos. Un abrazo.

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